La NASA continúa con sus planes ambiciosos de llevar a la humanidad a Marte, y para ello no deja diseñar rovers que se encarguen de explorar y prepararnos para esta misión. Pero ahora también han diseñado un dron, y con su peculiar forma de bumerán se podría convertir en el primero en surcar los cielos marcianos.
Credito: NASA / Dennis Calaba. La agencia espacial de los Estados Unidos asegura que ya está construyendo el primer prototipo de este dron, al que han llamado Prandtl-m y tiene una longitud de apenas poco más de 60 centímetros y un peso de poco más de 1.17 kilogramos, los cuales en teoría se reducirán a apenas unos 450 gramos una vez esté en Marte. La idea de la NASA es no solo explorar el suelo marciano, sino también sus cielos. Para ello estiman que este dron llegaría a Marte en algún momento entre el año 2022 y 2024, según la agencia espacial, en conjunto con un nuevo rover que están desarrollando para explorar zonas de posible asentamiento humano. De hecho, el dron será «lanzado» —o eyectado— desde el rover mientras este se encuentre en descenso, para que planee más de 30 kilómetros en los cielos de Marte. El Prandtl-m se podría convertir así en la primera aeronave hecha por el hombre en surcar los cielos del planeta rojo, mientras recolecta información sobre este y los niveles de radiación que presenta.
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Credito: NASA / Dennis Calaba. La agencia espacial de los Estados Unidos asegura que ya está construyendo el primer prototipo de este dron, al que han llamado Prandtl-m y tiene una longitud de apenas poco más de 60 centímetros y un peso de poco más de 1.17 kilogramos, los cuales en teoría se reducirán a apenas unos 450 gramos una vez esté en Marte. La idea de la NASA es no solo explorar el suelo marciano, sino también sus cielos. Para ello estiman que este dron llegaría a Marte en algún momento entre el año 2022 y 2024, según la agencia espacial, en conjunto con un nuevo rover que están desarrollando para explorar zonas de posible asentamiento humano. De hecho, el dron será «lanzado» —o eyectado— desde el rover mientras este se encuentre en descenso, para que planee más de 30 kilómetros en los cielos de Marte. El Prandtl-m se podría convertir así en la primera aeronave hecha por el hombre en surcar los cielos del planeta rojo, mientras recolecta información sobre este y los niveles de radiación que presenta.
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