Apego espiritual, cuando un espíritu se siente atraído peligrosamente por la energía de una persona
El apego espiritual ha sido conocido por médiums y psíquicos durante mucho tiempo, pero ahora mucha gente los está sufriendo a diario. Básicamente ocurre cuando una persona viva tiene la energía o el espíritu de un fantasma/entidad unida a ellas. Muchos son parásitos, algunos negativos, pero otros, en muy pocos casos son benignos.
También se han registrado casos en los que los espíritus se han apegado a personas ofreciéndoles un talento que no tenían, como componer música, pintar, dibujar, escribir poesía, etc. Sin embargo, en la mayoría de los casos, los apegos van desde ser temporales y desagradables hasta a largo plazo y aterradores. También pueden afectar a nivel de salud.
¿Por qué sucede el apego espiritual?
Puede haber muchas razones por las cuales ocurre un apego espiritual, pero las más comunes son las siguientes:
Muchos espíritus se unen a las personas simplemente porque encuentran paz en revivir algunos de los aspectos físicos de la vida. Otros están confundidos, no se dan cuenta de que están muertos y quieren acercarse a una persona viva. En este caso, suelen intentar contactar con los vivos para pedir ayuda. Estos apegos pueden ser deliberados o suceder sin que el espíritu se dé cuenta de lo que está haciendo. En estos casos, los espíritus generalmente no tienen ninguna intención de provocar daño alguno a las personas que están apegados.
Otros espíritus y entidades buscan deliberadamente la energía de las personas vivas. Son conocidos por muchos nombres, y básicamente se alimentan de la energía que emiten las personas en el mundo físico. Para que los espíritus hagan esto, la forma más fácil es tomar los enormes recursos de una persona y drenarles la energía, como un parásito. Además, el tipo de espíritu más común suele ser negativo. No solo quieren energía, sino que también disfrutan causando daños a su anfitrión y los que les rodean.
¿Quién está más en riesgo?
Hay algunas personas que parecen estar en mayor riesgo que otras. Los psíquicos o médiums muy experimentados tienen pocas probabilidades de verse afectados por el apego espiritual. Sin embargo, son muchas las personas que son psíquicas sin saberlo podrían estar en riesgo por varias razones. En primer lugar, pueden tener canales psíquicos abiertos permanentemente sin conocimientos de cómo cerrarlos o de cómo protegerse.
También están los niños psíquicos, que en realidad no son conscientes de su habilidad. De nuevo, son propensos a tener canales abiertos que pueden hacer que un espíritu entre. Los aficionados a las actividades ocultas o espirituales son personas que no tienen un gran conocimiento en áreas esotéricas o espirituales.
Suelen practicar “juegos” esotéricos, como el tablero ouija, pudiendo abrir una “puerta” que luego no pueden cerrar. La razón principal por la que están en riesgo se debe nuevamente a la falta de conocimiento, orientación y experiencia, así como a la falta de uso de alguna forma de protección. Por alguna razón, la tabla ouija en particular puede abrir accesos a los espíritu y demonios más peligrosos.
Las personas con ciertas adicciones están en alto riesgo de apego espiritual. Las drogas y el consumo excesivo de alcohol no solo disminuyen el aura natural del cuerpo, sino que en realidad causan “brechas” en nuestro escudo protector y en la psique misma.
Tipos de espíritus o entidades que pueden unirse a una persona
Parece que, aunque los espíritus de personas fallecidas son los principales causantes del apego, no son la única entidad que puede hacer esto.
Espíritus terrestres: Básicamente, estos son espíritus humanos que están atrapados o han optado por permanecer cerca de la dimensión física; las razones por las que algunos permanecen son numerosas. Muchos son personas traumatizadas y angustiadas. Otros son malvados y eligen quedarse en el plano terrestre aparentemente disfrutando del daño y el miedo que causan.
Entidades no humanas: Energías espirituales que no se han encarnado en el reino físico. Algunos parecen ser benignos. Muchos son extraños y desconocidos, pero no necesariamente negativos. Las formas más comunes o los nombres frecuentes dados a las entidades no humanas son ‘sombras’, ‘gente sombra’ y ‘demonios’.
Elementales: Estos seres espirituales a menudo se confunden con otras entidades. Básicamente, un elemental es un ser espiritual que pertenece a uno de los cuatro elementos conocidos: fuego, aire, agua o tierra. Mientras que los seres humanos son complicados, los elementales son mucho más simplistas. Tampoco son una forma espiritual como la de un humano en la otra vida. Su estado natural es en espíritu. Desafortunadamente, los elementales con frecuencia se sienten atraídos por los campos de energía humana. En su forma original, los elementales ciertamente no son malvados. Sin embargo, a menudo se invocan en prácticas ocultas negativas, donde se usan, abusan y luego se distorsionan y deforman. Además, en lugares donde las personas han cometido violencia extrema, abuso y malos pensamientos, los elementales que absorben estas energías sin darse cuenta pueden, sin que sea culpa suya, volverse demoníacos.
Los signos del apego espiritual
Hay varios niveles de apego espiritual que una persona puede experimentar. A continuación, algunos de los síntomas:
Atracción: Aquí es donde el espíritu o entidad no se ha unido realmente a una persona, sino que está cerca. Las personas han informado una fuerte sensación de no estar solos, ser seguidos y observados por una presencia invisible. Este nivel también puede producir fenómenos paranormales como golpes, voces y otros ruidos.
Opresión: Esta etapa se alcanza cuando la persona experimenta todo lo anterior, pero en un grado mucho mayor y con frecuencia durante el día y la noche.
Etapa final: Actividad paranormal como ruidos, voces, objetos en movimiento, presencias, sombras y voces incorpóreas. Todos estos fenómenos acompañados de pesadillas frecuentes y muy inquietantes. A nivel físico la persona puede experimentar fatiga y dolor en las articulaciones.
Cómo protegerse contra el apego espiritual
Como siempre comentamos, antes de considerar si tienes apego espiritual, debes de descartar cualquier problema de saludo. Una vez descartado, lo mejor para comenzar la protección es con buena salud. Un cuerpo sano y una mente sana y equilibrada son los cimientos sólidos desde los que comienza la defensa. La razón es que los espíritus negativos tienen una baja tasa de vibración, pero la energía positiva vibra mucho más.
Si tu vibración sufre debido a problemas de salud, estrés, adicciones, etc., entonces el tipo de energía que atraerás serán entidades de menor vibración. Hay cientos de técnicas de meditación y protección que pueden aprenderse y usarse para ofrecer seguridad adicional.
También puedes protegerte mediante limpiezas energéticas, amuletos y talismanes. La mayoría de las buenas técnicas de protección tienen procedimientos de conexión con la madre tierra. Lo principal que debes recordar sobre cualquier tipo de técnicas es probar algunas y seguir con la que mejor te funcione. Esto también te dará un mejor nivel de protección en lugar de uno que no se ajuste a su personalidad y creencias. También tienes que saber que además de estar sano y equilibrado, una de las mejores formas de protegerse es usar el sentido común.
La punta del iceberg paranormal
Lo paranormal es un vasto desierto de lo imposible que se convierte en nuestra realidad. Solo conocemos una pequeña parte de las muchas incógnitas que existen. El apego espiritual es un peligro bien conocido, pero es solo la punta del iceberg paranormal. No debemos subestimar lo que no conocemos ni tampoco lo que no podemos ver.
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