Luego de tres años de estudios mediante el uso de un georradar, expertos del INAH detectaron anomalías que corresponden a dos cavidades de entre dos y tres metros, en la parte frontal del Templo de las Inscripciones, de Palenque, Chiapas.
También, se corroboró que la cripta de Pakal II no descansa sobre la roca original y la cámara funeraria no fue el punto de partida para erigir esta construcción maya, como lo sugiriera hace 60 años su descubridor, el arqueólogo Alberto Ruz Lhuillier, informa en un comunicado el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Esta suposición deriva de resultados preliminares obtenidos mediante el uso de técnicas geofísicas no destructivas ni invasivas, que apoyan los trabajos arqueológicos.
En este proyecto binacional en el que colaboran el INAH, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y el Centro Nacional de la Investigación Científica de Francia.
En este proyecto binacional en el que colaboran el INAH, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y el Centro Nacional de la Investigación Científica de Francia.
El doctor Maksim Bano, quien ha colaborado con proyectos arqueológicos en diversas partes del mundo, dijo que su participación en una de las ciudades más importantes de la cultura maya no se limita a conocer el aspecto físico del subsuelo del Templo de las Inscripciones, sino también “los secretos que pueda guardar la cámara funeraria de un personaje como Pakal”.
El también profesor del Instituto de Física del Globo de la Universidad de Estrasburgo, comentó que las anomalías detectadas tres años atrás corresponden a dos cavidades ubicadas entre dos y tres metros de profundidad, al pie de la escalinata norte, por lo que consideró necesaria su verificación.
Los ingenieros José Ortega Ramírez y Luis Ángel Villa Alvarado, del Laboratorio de Geofísica del INAH, así como los doctores Maksim Bano y Pascal Sailhac, del CNRS, se trasladaron hace unas semanas a esta zona arqueológica localizada al noreste de Chiapas, para avanzar en sus estudios.
El propósito es, a partir de la información obtenida con el uso del georradar y la tomografía de resistividad eléctrica, desarrollar en conjunto un proyecto de exploración, expresó por su parte el arqueólogo Arnoldo González Cruz, responsable de los trabajos arqueológicos en el sitio de Palenque.
El propósito es, a partir de la información obtenida con el uso del georradar y la tomografía de resistividad eléctrica, desarrollar en conjunto un proyecto de exploración, expresó por su parte el arqueólogo Arnoldo González Cruz, responsable de los trabajos arqueológicos en el sitio de Palenque.
“Es cierto que existe esta teoría en torno a un acceso a la tumba de Pakal II por la parte frontal del edificio, pero esto no dejará de ser mera especulación hasta que no se haga un trabajo más formal, arqueológico, en el exterior, y apoyado en este tipo de tecnología de prospección geofísica”.
Tampoco es posible descartar o corroborar por el momento, que las anomalías reportadas en el frente del Templo de las Inscripciones aludan más bien a una antigua red hidráulica.
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