Me llegó hace días una promoción publicitaria sobre "La Ciberguerra", y quise publicar la info pero había que comprarla a un medio de difusión, dejo al final el sitio si desean hacerlo, pero aquí encontré otra info del mismo tema que pueden complementar.
FUENTE
Y aquí la info que mencioné al principio:
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LA CIBERGUERRA DEL FUTURO: TU HOGAR SERÁ EL CAMPO DE BATALLA
“La Tercera Guerra Mundial es una guerra de guerrillas de la información, sin ninguna división entre militares y civiles”
Marshall McLuhan, “La cultura es nuestro negocio”, 1970
Los nuevos documentos filtrados por Edward Snowden revelan que la NSA se está preparando para afrontar futuras guerras digitales, a medida que la propia agencia se muestra cada vez más agresiva hacia el resto del mundo.
“La Alianza Cinco Ojos”, una cooperación entre Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Australia, y Nueva Zelanda, está trabajando duro para desarrollar estas armas de guerra cibernética.
Son las calificadas como armas “D”, según ha informado el periódico alemán Der Spiegel, armas digitales destinadas a paralizar las redes informáticas y las redes que gestionan las infraestructuras: supervisión del suministro de agua, fábricas, aeropuertos y redes que controlan el flujo de dinero. Estos son los objetivos potenciales de esta ciberguerra en ciernes.
Sin embargo, el informe de Der Spiegel no menciona una cuestión más amplia, relativa al Internet que afecta a los dispositivos y aparatos cotidianos conectados a la red, que forman parte de nuestro día a día y que tenemos dentro de nuestros hogares.
Es el conocido como “Internet de las cosas”.
Según el jefe de la CIA David Petraeus el “Internet de las cosas” tendrá un impacto monumental en el mundo de las actividades clandestinas.
De hecho, según el experto en tecnología Richard Adhikari, el “Internet de las Cosas ya está listo para ser explotado por la NSA”
Los aparatos electrónicos y de consumo y los electrodomésticos se están convirtiendo cada vez más en “aparatos inteligentes”, siguiendo el camino iniciado por los propios teléfonos móviles, que al final dejaron de ser simples teléfonos para convertirse en teléfonos inteligentes o smartphones.
Actualmente, los chips RFID (identificación por radiofrecuencia) y la conexión inalámbrica a Internet permiten que dispositivos tan cotidianos como televisores, refrigeradores, impresoras y computadoras puedan comunicarse entre sí, con el objetivo de “hacernos la vida más fácil”.
Pero esto tiene un precio: la pérdida total y absoluta de nuestra privacidad.
Nadie habla de ello aún, pero los programas de armas cibernéticas de la NSA (o otras agencias), sin duda, van a explotar el control de estos dispositivos, que incluyen, no solo a los electrodomésticos y a los coches sin conductor ya en fase de pruebas, sino incluso, y lo que es más alarmante, a los dispositivos médicos, que pueden ser ya hackeados.
Actualmente, los marcapasos se pueden detener de forma remota, y las bombas de insulina se pueden manipular para suministrar dosis letales de insulina a sus portadores. Literalmente, un pirata informático o una agencia de espionaje, pueden matar a determinadas personas con un solo click de ratón, hackeando sus dispositivos médicos.
Con la llegada de los dispositivos implantables que se comunican a través de Wifi, el potencial para la manipulación y la piratería informática está creciendo exponencialmente y las consecuencias futuras pueden ser propias de una película de ciencia ficción.
Si los desarrolladores de estos dispositivos conectados a Internet no colaboran voluntariamente con la NSA para colocar puertas traseras de acceso para la agencia, la NSA, simplemente invertirá su inmenso poderío y presupuesto tratando de encontrar la manera de controlarlos a distancia.
Las compañías de seguros, ya están empezando a utilizar esta infraestructura de vigilancia como medio para monitorear el comportamiento de los individuos y de sus clientes, con el fin de tener información precisa a la hora de calcular las cuotas y bonificaciones.
Por ejemplo, espiar los hábitos alimenticios de cualquier ciudadano o cliente, dentro de poco será fácil con los chips RFID habilitados en los refrigeradores de nuestros hogares.
O incluso en nuestro propio inodoro. Actualmente, en países como Japón, existen inodoros capaces de analizar nuestro peso, nuestro índice de masa corporal, la presión arterial y el azúcar en la sangre; incluso son capaces de obtener muestras de orina y analizar nuestras heces, de las que obtienen datos como nuestro cuenteo de bacterias fecales, presencia de sangre en las heces o contenido graso de los excrementos y después transmitir toda esa información vía wifi a nuestro ordenador o smartphone y quien sabe si en un futuro a nuestro médico.
Toda esa información podrá ser monitorizada y almacenada por las agencias de espionaje o podrá ser pirateada por hackers informáticos.
Y no falta tanto tiempo para que esto se produzca como algunas personas pueden creer.
En 2018, se estima que habrá 112 millones de dispositivos portátiles conectados a Internet. En 2020, habrá 152 millones de coches conectados a Internet y 100 millones de bombillas y lámparas conectadas a Internet. Para el año 2022, habrá 1100 millones de contadores inteligentes instalados en los hogares, informando en tiempo real a las empresas de servicios públicos y otras partes interesadas sobre las actividades concretas realizadas dentro del hogar.
“La empresa controlada por el magnate Warren Buffet, UK Northern Powergrid junto con siemens AG, están poniendo a prueba un nuevo sistema de red eléctrica inteligente capaz de controlar el uso de los aparatos eléctricos de todos los hogares, bajo el pretexto de la ecología y del ahorro de recursos.Pruebas sobre este tipo de aparatos se están produciendo en los EE.UU., Reino Unido, Australia y Francia, entre otros países.Sistemas de medición inteligente envían señales desde cada contador cada quince segundos, dando una visión completa de cada movimiento que involucra uso de energía dentro de una casa, desde el encendido de una luz hasta el uso de cualquier electrodoméstico, lo que significará un nuevo método de intrusión en la privacidad de los ciudadanos”
Así pues, ¿aún hay alguien que pueda creer que la idea de que nos espíen nuestros propios electrodomésticos es una locura?
Pongamos un pequeño ejemplo más: de acuerdo con la nueva política de privacidad de Samsung, su televisión inteligente puede grabar sus conversaciones. En el propio libro de instrucciones de los últimos modelos inteligentes de la marca, podemos leer: “Por favor, tenga en cuenta que si sus palabras habladas incluyen información confidencial personal o otro tipo de información sensible, esa información estará entre los datos capturados y transmitidos a un tercero a través de su uso del instrumento de reconocimiento de voz de su televisor”
( Hablamos de ello en el artículo titulado: OTRO PASO HACIA EL GRAN HERMANO: LOS TELEVISORES INTELIGENTES QUE ESPIAN A LOS USUARIOS )
Esto que estamos viviendo, es solo el comienzo. La implantación de toda esta tecnología de control exhaustivo, vendrá acompañada de argumentos relacionados con nuestra seguridad, algo de lo que ya estamos viendo las primeras muestras.
Ya podemos apostar a que el futuro estará plagado de “lobos solitarios”, “terroristas domésticos sin escrúpulos” y “hackers antisociales y psicópatas”, que podrían ser nuestro propio vecino y que “podrían haber sido detenidos si se les hubiera controlado adecuadamente”.
Ellos serán la excusa para que la población acepte sin rechistar o incluso reclame, el monitoreo y control absoluto de todas nuestras actividades cotidianas a través de nuestros propios dispositivos domésticos.
Hace 25 años, ¿habríamos imaginado que todo lo que hiciéramos en las calles céntricas de una gran ciudad sería grabado por cámaras de vigilancia?
Pues ya podemos prepararnos…dentro de poco, esa vigilancia se producirá también dentro de nuestro propio hogar, de forma sutil e imperceptible.
Nuestra propia nevera, nuestra propia lavadora o nuestro propio televisor nos espiarán y ejercerán de chivatos, transmitiendo automáticamente toda la información sobre nuestras actividades y costumbres y sobre todo lo que digamos o opinemos.
Y quizás al otro lado, una computadora analice nuestras palabras y interprete alguno de nuestros comentarios como “una potencial amenaza para la seguridad”.
Pero tranquilos, no hay nada que temer: todo será en aras de “nuestra comodidad y nuestra seguridad”…
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Y aquí la info que mencioné al principio:
contadores inteligentes instalados en los hogares, informando en tiempo real a las empresas de servicios públicos, realmente aqui en España ya tenemos los nuevos contadores electricos que envian a traves de una señal mucho mas potente que el wifi convencional a la compañia de luz para obtener los consumos a tiempo real, normalmente en los edificios mas modernos los instalan en un cuarto fuera del domicilio del abonado para que no los puedan piratear y copmo ese mas van a instalar y mas controlados cada vez, cabe esperar un tormenta solar bien potente y que dejen de tanto contro, un saludo amigo.
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BorrarEs de verdad al parecer inevitable quedarnos sujetos y controlados por tanto dispositivo interconectádo a conexiones de internet y por añadidura afectados por los campos de frecuencias electromagnéticas que irradian y provocan a la vez enfermedades a nuestros organismos, creo es parte de la agenda del transhumanismo del nuevo orden mundial, una jaula de la cual no nos damos cuenta PERO QUE YA ESTAMOS ADENTRO!, aquí en Chiapas México también ya están cambiando los medidores de luz por digitales que controlarán todo el flujo de energía en una casa (publico después una entrad, al rato) ES DE VERDAD PREOCUPANTE!, pero mientras a la población la sigan enajenando con tanta mierda basura en la tele y haciéndole un borrego consumista de sexo (en muchas presentaciónes) como la comida-chatárra programada para irnos envenenado poco a poco, les vale. ahora si estaría bien un saludito con toda la calidéz de nuestro solecito para provocar una supertormenta solar...(si no lanzan algo parecido a una bomba de pulso electromagnético) lo malo es que somos tan dependientes de tanto control que no toleraríamos vivir sin dejar de utilizarlos, o sea, que gustósos seguiremos estando con el collar en el pescuezo (de mi parte trato de no atarme demasiado, jej.). Saludos mi buen!